Conquistando el Temor. La verdadera causa de la crisis
Written by Fernando Celis on 2 septiembre, 2013
Existen dos fuerzas que dominan todo en el viaje hacia tu destino: DOLOR y PLACER, De forma natural, buscamos la manera de salir de aquello que nos produce dolor venga de la forma que venga: la falta de dinero, la falta de amor, la inseguridad, la búsqueda de status son algunos elementos que impulsan a tomar acción.
Por otro lado, buscamos acercarnos a aquello que nos produce placer: amor, comodidad, comida, dinero, felicidad. De acuerdo a como calibramos estas dos fuerzas y que cosas conectamos con dolor y placer, nuestro paseo por la vida será mas fácil o más estresante.
Los dos motores que impulsan dolor y placer:
La emoción limitante mas poderosa que existe es el TEMOR y es lo que nos detiene. El temor a perder algo ya sea real o imaginario nos conecta con DOLOR y evita que avancemos. La emoción que nos libera es CORAJE, que nos conecta con nuestros propios recursos y hace que avancemos hasta el PLACER. Estas dos emociones – TEMOR Y CORAJE son las que definen la velocidad con la que avanzamos a nuestras metas y muchas veces manejan nuestro autobús.
Toda crisis conlleva algún tipo de temor – temor al peligro de perder lo que hemos logrado o lo que queremos lograr, temor a perder el reconocimiento o el miedo a perder nuestro sustento. El temor al peligro es común en nuestro mundo: temor a enemigos, a la vejez, al rechazo, y a la muerte. Estos miedos son un gran motivador o un gran desacelerador dependiendo de cómo los utilizamos.
Desde la estructura de miedo, el mundo se ve hostil, lleno de trampas, desconfianzas, y amenazas. El temor es la herramienta predilecta para tener control en todo régimen totalitario. Una vez que nos enfocamos en el temor, el temor del mundo comienza a alimentarlo y amplificamos la experiencia: el temor a perder una relación nos vuelve obsesivos y paranoicos. el miedo a perder abundancia nos vuelve avaros e inseguros. Según el Dr. David Hawkins «el temor, al ser altamente contagioso se puede volver una tendencia dominante en una sociedad, que no es capaz de ver la salida debido a los múltiples puntos ciegos que el temor establece.»
En su libro Poder vs. Fuerza el Dr. Hawkins plantea una jerarquía de niveles de conciencia humana. De abajo hasta arriba, los niveles de conciencia son: verguenza, culpa, apatía, temor, codicia, ira, orgullo, coraje, neutralidad, voluntad, aceptación, razón, amor, alegría, paz, iluminación.
Una situación difícil requiere de una persona que sepa como enfrentar y dominar la emoción del miedo para ver las posibilidades que siempre existen. Una sociedad temerosa requiere de un líder que demuestre que ha superado el miedo para así guiarlos de la esclavitud en que vive. Una organización enfrentando una crisis financiera requiere de líderes y colaboradores que enfrentan y superan el temor enfocándose a sus atributos y fortalezas.
El temor puede alterar nuestro sistema interno y darnos herramientas para salir de una situación amenazante, pero también, si no sabemos canalizarlo, nos incapacita y nos detiene, produciendo precisamente el resultado que tanto queremos evitar.
Lo que temes ya está aquí, en la forma de la alucinación que las cosas están peor de lo que realmente están.
Una forma de esquivar la flecha de la emoción paralizante del temor es preguntarse continuamente : «y…cual es el problema? Hasta llevar nuestra interpretación del temor al limite, asi:
Temo que mi jefe no me aprecie por mi desempeño.
«y…cual es el problema?
Que puedo perder mi trabajo
«y…cual es el problema?
Que no pueda pagar las cuentas
«y…cual es el problema?
Que mi pareja me deje
«y…cual es el problema?
Que no pueda conseguir sustento para vivir
«y…cual es el problema?
Que me quede sin casa
«y…cual es el problema?
Que nos quedemos sin comida y nos morimos de hambre.
«y…cual es el problema?
Todo temor tiene una raiz que es el miedo a perder valor, el miedo a perder amor o el miedo a morir. Una vez que se encara esta verdad y nos damos cuenta de lo absurdo de nuestra interpretación de la situación, llegaremos a una conclusión mas elevada con respecto al problema a resolver: nos recordamos que antes lo hemos logrado y nos convencemos que así lo lograremos en el presente, es el portal que abre una nueva estructura, una nueva emoción que nos libera. La emocion ptenciadora del CORAJE.
En una estructura de Coraje, nuestro potencial altera de manera significativa nuestra experiencia e inspira a los demás a realizar lo mismo. Esta es la zona de la exploración, el logro, la fuerza y la determinación. Coraje implica la voluntad de encarar la adversidad y los obstáculos que se presentan para manejar efectiva y creativamente las oportunidades que siempre están presentan y que en ocasiones diversas el temor ha querido opacar.
Al vibrar en este nivel de emoción, le retornamos al mundo tanta energía como la que le hemos quitado. Al lograr feedback positivo como resultado de nuestro esfuerzo, esto fortalece nuestra autoestima. Aquí es donde comienza la productividad. La decisión libre de actuar en coraje es una de aceptar la responsabilidad y el acto de rendir cuentas a uno mismo por nuestras decisiones y las acciones a tomar. Es atravesar un portal para ver las cosas como son, manteniendo la vision de lo que se espera, actuando en el presente con la mejor de nuestras habilidades, enfocados en la acción ejecutada.Vencer y conquistar la emoción paralizante del temor requiere de voluntad, y no hablo de fuerza de voluntad sino de la voluntad profunda de querer y saber que existe algo mejor y algo que nos guía constantemente.
Al avanzar con coraje a pesar de la emoción limitante estaremos fortaleciendo nuestro verdadero brillo ya que coraje es realizar las cosas a pesar del miedo no sin el. Al lograr objetivos y avanzar hacia nuestro maximo potencial conectamos con aquello que es real, nuestras relaciones se fortalecen y comenzamos a desarrollar un liderazgo basado en respeto e inspiración.
Al final podrás trascender los temores de la perdida de valor, la perdida de amor y la perdida de sustento que determinan la verdadera raiz de nuestros temores.
Toda situación desafiante desata uno de estos tres temores, las armas que tienes se basan en tu disposición de asumir coraje para confiar, coraje para actuar y coraje para amar incondicionalmente.
Al trascender las situaciones que producen temor, insólitamente las cosas caen en su sitio y las personas se vuelven mas tolerantes y las oportunidades se presentan de forma mas fluida y frecuente.